Tras muchos años yendo por libre con el sistema VTEC, Honda ha decidido pelear con las mismas armas que sus rivales, decidiendo incorporar un turbocompresor bajo el capó del Type R, tecnología a la que anteriormente no han recurrido en sus versiones de calle, pero que dominan en el campo de la competición, como son las series Indy Car americanas, o la Fórmula 1 de los años 80, a lo que se suma el anuncio de la vuelta a la modalidad reina, la Fórmula 1, suministrando motores a partir de 2015. ¿Será casualidad que ese mismo año verá a luz el Type R Turbo…?

2 litros turbo, 280 CV
Motor 2 litros de inyección directa y turboalimentación ¿Les suena de algo? Son las credenciales del rey de la categoría compacta, el Golf GTI, pero la potencia máxima de éste se sitúa en los 230 CV de la versión Performance, por lo que queda patente que los misiles de Honda no apuntan al Golf GTI, sino al Volkswagen Golf R y sus 300 CV, con el objetivo añadido de convertirse en el tracción delantera más rápido que haya rodado en Nurbürgring, para lo cual han echado mano de su piloto estrella en el Mundial de Turismos, el italiano Gabriele Tarquini, encargado del desarrollo en pista del nuevo icono de Honda.

En el vídeo que ha facilitado Honda de las pruebas en el Infierno Verde, se extrae un dato que no ayuda en su intento de dominar la competida categoría de los GTI, como es el cambio manual que maneja el veterano piloto transalpino, en clara contraposición con el alabado DSG del Grupo Volkswagen, circunstancia que sería un serio frenazo en la decisión de compra del vehículo japonés, a no ser que el cambio de doble embrague estuviera en fase de diseño y hubiera que esperar a su validación para anunciar la comercialización del mismo. Si Renault en una categoría inferior, como es la del Clio R.S. 200, ha tenido que rendirse a los encantos del cambio secuencial pilotado, Honda no tendrá más remedio que montarlo si quiere aspirar a lo más alto.